Bodegas subterráneas
Un pueblo tan vinculado al vino no podía dejar de tener un valioso conjunto de lagares y bodegas.
Las bodegas sotillanas, más de ochenta, tienen fama de ser de las mejores de toda la Ribera.
Abiertas en el monte de San Jorge, se ordenan en tres niveles alrededor de un cerro cónico. Son largas galerías excavadas en la tierra, muchas con bellas bóvedas de piedra, donde reposa, entre oscuridad y silencio el vino.